SIETE BUENOS MINUTOS COLOCAN AL TORDESILLAS EN LA FINAL
C.D. RIOSECO Farolo; Valdi (Álvaro 46’), Piti, Gato, David; Darío (Sánchez 73’), Guindi; Maicro (Sergio 90’+), Paco, Santos (Pepi 84’); y Cata (Goyo 60’).
Delegado: Antonio Pardo.
ATCO. TORDESILLAS: Asenjo (Barajas 85’); Rafita, Toño, Pablo Sastre, Andrés; Alvarito, Parla (Adri 72’); Ivi (Kelvin 80’), Héctor, Zdravko (Sergio Román 65’) y Hamat (Sergio 69’).
Entrenador: José Luis Fernández.
GOLES
0-1 (62’): Iván, de penalti.
0-2 (68’): Héctor.
0-3 (69’): Hamat.
ÁRBITRO: ALONSO RODRÍGUEZ (CYL).
Amonestó a Piti (5’), Guindi (61’); Hamat (27’) y Pablo Sastre (66’).
LOS ROJIBLANCOS APROVECHARON TRES DESPISTES CONSECUTIVOS DEL RIOSECO
Siete minutos necesitó el Atlético Tordesillas para sentenciar un encuentro poco vistoso en el que apenas se pudieron observar ocasiones de gol más allá de los tantos marcados por el equipo dirigido por José Luis Fernández. Durante la primera mitad ambos equipos se dedicaron a controlar y no perder la posesión del balón.
En el minuto 62 durante una jugada dentro del área cayó derribado de manera clara Héctor por lo que el colegiado señaló la pena máxima; ésta fue materializada por Iván con un tiro a la izquierda de la portería del Rioseco. Este gol hizo mella en los riosecanos que se vinieron abajo y cometieron bastantes errores defensivos de manera continuada.
En el 68’ llegaría el segundo tanto tras una buena internada de Zdravko por la banda izquierda y el posterior remate ante el portero por parte de Héctor. Un minuto después Hamat colocó el 3-0 en el marcador tras recuperar y controlar el balón dentro del área del conjunto amarillo.
La única ocasión que dispuso el Rioseco para acortar distancias fue en el minuto 77 cuando, tras realizar una entrada desde la banda, Santos efectuó un tiro dentro del área que tuvo que despejar Asenjo. En el resto del encuentro el Rioseco no consiguió crear ninguna acción ofensiva que pudiera poner en peligro la meta tordesillana y únicamente se pudieron ver lanzamientos de falta directa y tiros que se marcharon muy por encima de la portería rojiblanca.